El Gourmet Urbano: Personaliza tu chocolate

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Personaliza tu chocolate

Ideas y consejos para preparar tabletas de chocolate con especias y otros ingredientes

El chocolate es un alimento tan delicioso como energético. Aporta una cantidad elevada de calorías, aunque no todos los tipos de chocolate son iguales. A quienes nos gusta, pocas cosas nos hacen tan felices como poder degustar un par de onzas de nuestro chocolate favorito, con tranquilidad, sin prisas ni alborotos. Pero también, con el paso del tiempo, se aprecian más los sabores amargos y, sin saber cómo, de pronto nos vemos eligiendo un chocolate puro, con el 65% de cacao o más, en lugar de las versiones más azucaradas. A continuación se describe cómo personalizarlo con frutos secos y especias para potenciar su aroma y su sabor, según los gustos personales.

Imagen: belchonock

Ciertas combinaciones de sabores quedan muy bien, tal como se han esforzado en demostrar los creativos de las marcas de chocolate. En los últimos años, se ha pasado de tener en las tiendas cuatro referencias de chocolate (puro, con leche, con avellanas y con almendras) a lineales enormes donde el chocolate se combina con galletas dulces, con galletas saladas, con caramelo, con fresas, con uvas pasas, con cremas dulces de diferentes sabores como café, tarta de queso y un largo etcétera.

Cuando una materia prima es buena, cuanto menos se manipule, mejor. Así se respetará más su sabor y su esencia. Una opción interesante para probar mezclas es utilizar un chocolate de calidad media, de tal forma que se le pueda dar una nueva vida agregando ingredientes según el gusto de la persona. Para hacer estas personalizaciones de chocolate se puede emplear tanto chocolate fondant como puro, al porcentaje que más guste.

Chocolates personalizados con especias


Para elaborar este tipo de chocolate, en primer lugar se debe fundir el chocolate al baño María y mantenerlo templado y líquido hasta el momento de hacer la mezcla.

Hay que trabajar sobre superficies lisas, limpias y frías, como encimeras de cocina, placas de horno frías o mesas no porosas.

En la encimera, o sobre la placa de metal, se coloca un molde con una base de papel film. Luego, sobre este molde se vierte el chocolate templado y líquido.

  • Se extiende el chocolate con una espátula sobre la base con papel film hasta que quede una fina lámina de chocolate. Luego ya se pueden dar toques diferentes.
  • Algunas mezclas muy interesantes son las de chocolate con jengibre, chocolate con sal en escamas, chocolate con canela, chocolate con curry y, por supuesto, chocolate con pimienta.
  • Una vez espolvoreada la especia elegida, se deja enfriar y se endurece de nuevo para poder después trocear y guardar en un lugar fresco y seco hasta su consumo.
  • También se pueden hacer pequeños círculos de chocolate y colocar una brocheta en medio, de manera que cuando se endurezcan se puedan presentar como unas piruletas. De esta forma, se puede preparar un ramo de piruletas de chocolate con diversas especias.

Chocolates rellenos caseros


Siguiendo la técnica anterior de deshacer el chocolate al baño María, se necesitarían unos moldes con un poco de altura para poder verter el chocolate y que este adquiera volumen y así rellenar del ingrediente elegido.

Una forma sencilla es la de untar, con un pincel, aceite de girasol el interior de unas cubiteras, de las utilizadas habitualmente para elaborar hielo. En el caso de que sean moldes flexibles de silicona no haría falta untar aceite. Hay que verter en ellas un poco de chocolate templado, esperar a que se solidifique, rellenar con uvas pasas, trocitos de frutos de secos, trocitos de galletas, frutas desecadas... y, a continuación, terminar de rellenar con más chocolate fundido. De esta manera, el exterior estará liso en forma de cubito pero en el interior aguardará la sorpresa con la que se ha rellenado.

Si se prefiere el formato tableta de toda la vida, habrá que emplear un molde de ese tamaño. Si es flexible, de silicona, no hace falta hacer nada; si, en cambio, es rígido, metálico, entonces se debe untar el interior con aceite de girasol o forrar con papel film. Entonces se mezcla el chocolate fundido con frutos secos, trozos de galletas dulces o saladas, bizcochos o frutitas desecadas, todas ellas enteras o troceadas según el gusto personal.

Si se le quiere dar un toque de especias, esta versión también lo admitiría. Luego solo queda dejar enfriar y ¡a disfrutar las mezclas más locas y sabrosas para el paladar!

PEIO GARTZIA

Fuente: Eroski Consumer

No hay comentarios. :